Enero 18

Salmo 18:1-50Ir a web de la Biblia, o abrir en app (Youversion)

LA MAJESTAD Y MISERICORDIA DE DIOS

EN los primeros tres versículos tenemos, como es costumbre en los salmos, un resumen del contenido del salmo entero. Al leer lo que David encuentra en su Dios sentimos vergüenza porque nuestra adoración es tan fría y rutinaria; usamos muy poco la imaginación y el lenguaje pictórico, mientras que David multiplica metáforas al alabar a su Dios a quien ama. Se refiere a él como: fortaleza, roca, castillo, libertador, escudo, fuerza y alto refugio.

David se deleita en enfatizar que todo esto es suyo. Cada una de estas metáforas tiene un profundo sentido espiritual.

En 1 Timoteo 6:11,1211Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre. 12Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo fuiste llamado, habiendo hecho la buena profesión delante de muchos testigos. se nos manda huir de ciertas cosas y pelear “la buena batalla de la fe”. Algunas de las figuras en este salmo nos enseñan a dónde debemos huir y otras, hablan de los recursos que tenemos para pelear. El escudo, por ejemplo, es para la defensa y la fuerza es para el ataque.

El imponente despliegue de poder en los versículos 7-15 7La tierra fue conmovida y tembló; se conmovieron los cimientos de los montes, y se estremecieron, porque se indignó él. 8Humo subió de su nariz, y de su boca fuego consumidor; carbones fueron por él encendidos. 9Inclinó los cielos, y descendió; y había densas tinieblas debajo de sus pies. 10Cabalgó sobre un querubín, y voló; voló sobre las alas del viento. 11Puso tinieblas por su escondedero, por cortina suya alrededor de sí; oscuridad de aguas, nubes de los cielos. 12Por el resplandor de su presencia, sus nubes pasaron; granizo y carbones ardientes. 13Tronó en los cielos Jehová, y el Altísimo dio su voz; granizo y carbones de fuego. 14Envió sus saetas, y los dispersó; lanzó relámpagos, y los destruyó. 15Entonces aparecieron los abismos de las aguas, y quedaron al descubierto los cimientos del mundo, a tu reprensión, oh Jehová, por el soplo del aliento de tu nariz. es respuesta a la oración del versículo 6En mi angustia invoqué a Jehová, y clamé a mi Dios.
El oyó mi voz desde su templo, y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.
. El versículo final50 Grandes triunfos da a su rey, y hace misericordia a su ungido, a David y a su descendencia, para siempre. nos recuerda que la victoria nos es dada en Cristo Jesús (1 Co.15:57Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.). Debemos agradecerla y no sentir orgullo creyendo que la hemos obtenido por nuestro propio poder.

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