LA escalera que conectaba el cielo con la tierra sirve para ilustrar lo que leemos en Juan 14:66Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.. Cristo es el único camino de acceso al Padre, porque es el único Mediador que reúne los requisitos necesarios que vemos ilustrados en la escalera que soñó Jacob (1 Ti. 2:5Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre).
1. El extremo que tocaba el cielo nos habla de la deidad plena de Cristo: Él es Dios (Ro. 9:5de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.; Heb. 1:8Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino.).
2. El extremo que estaba apoyado en la tierra nos hace pensar en su humanidad perfecta (Heb. 2:17Por lo cual debía ser en todo semejante a sus hermanos, para venir a ser misericordioso y fiel sumo sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar los pecados del pueblo.; 4:15Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.). Los ángeles que usan la escalera, según Juan 1:51Y le dijo: De cierto, de cierto os digo: De aquí adelante veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre., “suben y descienden sobre el Hijo del Hombre”. Aquí hay una identificación plena de Cristo con la escalera que une al hombre con su Dios.
Cuando Jacob acepta el castigo divino y sale de su hogar, Dios le envía una visión y luego le habla desde lo alto de la escalera. A veces Dios no nos habla porque no queremos concederle el lugar que le corresponde. A él le toca estar en lo alto y a nosotros postrarnos a sus pies.
Contrastemos la promesa incondicional de Dios (v. 15He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho.) con el voto de Jacob, lleno de condiciones (v. 21y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios.). Pero antes de criticar a Jacob meditemos en nuestra relación con Dios y sus promesas.