En nuestra lectura notamos:
1. La profecía contra el sur (20:45-4945Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: 46Hijo de hombre, pon tu rostro hacia el sur, derrama tu palabra hacia la parte austral, profetiza contra el bosque del Neguev. 47Y dirás al bosque del Neguev: Oye la palabra de Jehová: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí que yo enciendo en ti fuego, el cual consumirá en ti todo árbol verde y todo árbol seco; no se apagará la llama del fuego; y serán quemados en ella todos los rostros, desde el sur hasta el norte. 48Y verá toda carne que yo Jehová lo encendí; no se apagará. 49Y dije: ¡Ah, Señor Jehová! ellos dicen de mí: ¿No profiere éste parábolas?). Lo tajante de frases como: “no se apagará” (v. 48Y verá toda carne que yo Jehová lo encendí; no se apagará. 49Y dije: ¡Ah, Señor Jehová! ellos dicen de mí: ¿No profiere éste parábolas?), cerraría la boca de los que decían que el castigo sería corto y que con la ida de los primeros cautivos había terminado.
2. Profecía contra Israel (21:1-7Ir a la Biblia en línea). La espada que en otro tiempo los defendió (Jos. 5:13-1513Estando Josué cerca de Jericó, alzó sus ojos y vio un varón que estaba delante de él, el cual tenía una espada desenvainada en su mano. Y Josué, yendo hacia él, le dijo: ¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos? 14El respondió: No; mas como Príncipe del ejército de Jehová he venido ahora. Entonces Josué, postrándose sobre su rostro en tierra, le adoró; y le dijo: ¿Qué dice mi Señor a su siervo? 15Y el Príncipe del ejército de Jehová respondió a Josué: Quita el calzado de tus pies, porque el lugar donde estás es santo. Y Josué así lo hizo.) volvería a desenvainarse, pero para castigarlos (21:3Dirás a la tierra de Israel: Así ha dicho Jehová: He aquí que yo estoy contra ti, y sacaré mi espada de su vaina, y cortaré de ti al justo y al impío.). Para el impío habría destrucción y para el justo, disciplina, como cuando el hortelano rescata una raíz o rama infectada para guardarla en el invernadero hasta que retoñe.
3. La espada del vengador (21:8-17Ir a la Biblia en línea) está pulida y afilada. Frente a ella han de temer.
5. El castigo del príncipe (21:24-2724Por tanto, así ha dicho Jehová el Señor: Por cuanto habéis hecho traer a la memoria vuestras maldades, manifestando vuestras traiciones, y descubriendo vuestros pecados en todas vuestras obras; por cuanto habéis venido en memoria, seréis entregados en su mano. 25Y tú, profano e impío príncipe de Israel, cuyo día ha llegado ya, el tiempo de la consumación de la maldad, 26así ha dicho Jehová el Señor: Depón la tiara, quita la corona; esto no será más así; sea exaltado lo bajo, y humillado lo alto. 27A ruina, a ruina, a ruina lo reduciré, y esto no será más, hasta que venga aquel cuyo es el derecho, y yo se lo entregaré.). La voz de Dios truena contra el príncipe de Israel que ha guiado a su pueblo por caminos de maldad.
6. Juicio contra los amonitas (21:28-3228Y tú, hijo de hombre, profetiza, y di: Así ha dicho Jehová el Señor acerca de los hijos de Amón, y de su oprobio. Dirás, pues: La espada, la espada está desenvainada para degollar; para consumir está pulida con resplandor. 29Te profetizan vanidad, te adivinan mentira, para que la emplees sobre los cuellos de los malos sentenciados a muerte, cuyo día vino en el tiempo de la consumación de la maldad. 30¿La volveré a su vaina? En el lugar donde te criaste, en la tierra donde has vivido, te juzgaré, 31y derramaré sobre ti mi ira; el fuego de mi enojo haré encender sobre ti, y te entregaré en mano de hombres temerarios, artífices de destrucción. 32Serás pasto del fuego, se empapará la tierra de tu sangre; no habrá más memoria de ti, porque yo Jehová he hablado.). Eran vecinos de Israel que habían tomado placer en los castigos que caían sobre Jerusalén.