La lección de la vid vuelve a señalar la misma verdad de ayer. Hay algo que he de hacer yo antes que Dios pueda hacer maravillas en mi vida. Si Dios no contesta mis oraciones, ¿será porque no he entendido el versículo 7Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.?
Aquí el énfasis está en permanecer: (a) En el Señor (vs. 4-74Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. 5Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. 6El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden. 7Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.). (b) En su amor (vs. 9,109Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor. 10Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor.).
Si esto es así, permanecerán en mí: (a) El Señor (v. 5Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.). (b) Sus palabras (v. 7Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.). (c) Su fruto (v. 16No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.).
Hay en este pasaje una lección para todos los creyentes que se sienten inútiles. ¡Qué cosa más inútil que una rama de vid! No sirve para nada (Ez. 15:2-52Hijo de hombre, ¿qué es la madera de la vid más que cualquier otra madera? ¿Qué es el sarmiento entre los árboles del bosque? 3¿Tomarán de ella madera para hacer alguna obra? ¿Tomarán de ella una estaca para colgar en ella alguna cosa? 4He aquí, es puesta en el fuego para ser consumida; sus dos extremos consumió el fuego, y la parte de en medio se quemó; ¿servirá para obra alguna? 5He aquí que cuando estaba entera no servía para obra alguna; ¿cuánto menos después que el fuego la hubiere consumido, y fuere quemada? ¿Servirá más para obra alguna?), ni para hacer una estaca. Pero si está en la vid, ¡qué diferencia! Ahora sí es capaz de llevar mucho fruto. Aprendamos los dos lados de la lección. No tenemos por qué sentirnos inútiles, ya que si permanecemos en Cristo él hará maravillas en nosotros; pero no nos sintamos grandes ya que sin Cristo nada podemos hacer (v. 5He aquí que cuando estaba entera no servía para obra alguna; ¿cuánto menos después que el fuego la hubiere consumido, y fuere quemada? ¿Servirá más para obra alguna?).
La posición “en mí” no es algo estático sino dinámico. Hay quien está en la vid, pero no lleva fruto (v. 2Hijo de hombre, ¿qué es la madera de la vid más que cualquier otra madera? ¿Qué es el sarmiento entre los árboles del bosque?). Busquemos, pues, que nuestro permanecer en Cristo y su Palabra sea algo dinámico que se manifieste en progreso y adelanto.