“Pero tú eres nuestro padre, si bien Abraham nos ignora, e Israel no nos conoce; tú, oh Jehová, eres nuestro padre; nuestro Redentor perpetuo es tu nombre.”
1. ¿Qué hace un padre?
a) Le da su apellido a sus hijos, cuando los registra como suyos.
b) Trabaja para satisfacer las necesidades de su hogar (alimento, casa, vestido...).
c) Provee para el futuro de sus hijos.
2. ¿Qué hacen los hijos con su papá de manera muy especial?
a) Andan de la mano.
b) Platican y juegan juntos.
c) Se ayudan en algunas tareas.
3. ¿Qué es lo que un hijo reconoce de su padre?
a) Que tiene autoridad, cuando lo obedece.
b) Que sabe mucho, cuando le pregunta.
c) Que lo quiere mucho, cuando le cuenta sus problemas.
Por esto hemos de obedecerlo en todo, contarle todos nuestros problemas y andar siempre de su mano.
1. Los que vivieron en el tiempo de Isaías, pensaban que ya no eran descendientes de Abraham, y que Israel no los reconocía como integrantes de su pueblo, pero sabían que Dios seguía siendo su Padre. Tenían dos razones:
a) Él los creó del polvo de la tierra.
b) Él los redimió de Egipto.
2. Nosotros tenemos muchas razones para llamar a Dios nuestro Padre. La palabra “nos” te ayudará a hacer la lista siguiente. Anota lo que entiendes al leer el versículo indicado de la Epístola a los Efesios.
Dios es mi Padre porque me:
3. La palabra “para” de los siguientes versículos te ayudará en la siguiente lista:
Dios, como mi Padre, quiere que yo sea:
b) (1:6para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado, )
4. Por todo lo visto, como hijos de Dios, tenemos que:
AMINAR CON ÉL
RECER COMO ÉL
UMPLIR SU VOLUNTAD
Cuando oramos tal como nos lo enseñó el Señor Jesús (Mt. 6:9Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. ), decimos: “Padre nuestro...” y hacemos bien en comenzar con estas palabras. Pero llamar a Dios nuestro Padre, trae un gran compromiso: debemos ser como él es: santo (1 P. 1:16porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.), perfecto (Mt. 5:48Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.) y misericordioso (Lc. 6:36Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.).