“Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen?”
Algunos preguntaron: “¿Quién es éste?” Y lo hicieron por estos motivos:
1. La autoridad que demostraba (1:27Y todos se asombraron, de tal manera que discutían entre sí, diciendo: ¿Qué es esto? ¿Qué nueva doctrina es esta, que con autoridad manda aun a los espíritus inmundos, y le obedecen? ). Tenía poder sobre los demonios.
2. Lo que él decía (2:7¿Por qué habla éste así? Blasfemias dice. ¿Quién puede perdonar pecados, sino sólo Dios? ). Afirmaba que los pecados habían sido perdonados.
3. Lo que él hacía (4:41Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen?). Controlaba el viento y el mar.
Si hubieran tenido ojos para ver, mente para entender y corazón para creer, hubieran concluído que Jesús es el Hijo de Dios.
El texto también dice: “Entonces temieron con gran temor”. ¿Has sentido tú esto? Probablemente sí; a todos nos pasa, pero si Cristo está en tu vida (la barca) y estás obedeciendo sus órdenes (“pasemos al otro lado”), no tienes razón para temer (4:35,36,4035Aquel día, cuando llegó la noche, les dijo: Pasemos al otro lado. 36Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas. 40Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe?).
¿Para qué necesitas tener fe?
1. Para oír y entender lo que Dios te dice (4:20Y éstos son los que fueron sembrados en buena tierra: los que oyen la palabra y la reciben, y dan fruto a treinta, a sesenta, y a ciento por uno.). Aquí se compara con RECIBIR.
2. Para esperar resultados (4:27y duerme y se levanta, de noche y de día, y la semilla brota y crece sin que él sepa cómo.). Aquí se compara con ENTREGAR. Como el hombre que sembró en la tierra su semilla, yo doy mi vida a Dios, y espero que él dé el crecimiento (4:28,2928Porque de suyo lleva fruto la tierra, primero hierba, luego espiga, después grano lleno en la espiga; 29y cuando el fruto está maduro, en seguida se mete la hoz, porque la siega ha llegado.).
3. Para no tener miedo (4:40Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe?). Aquí se compara con CONFIAR, pues los discípulos deberían haber razonado que si estaban obedeciendo y si el Señor estaba con ellos, nada les iba a pasar.
Citas: Heb. 12:1Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante; Jn. 14:1No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí; Jn. 16:13Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.; Mr. 16:20Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían. Amén.
Para cruzar el mar de esta vida y entrar en el reino de Dios como un vencedor, necesitarás pasar por muchas pruebas. Por esto debes recordar que si tu fe se debilita, entonces, tu ánimo decae y el que tiene miedo nunca hace bien las cosas.
Confirma tu fe en el Señor para que esto no te pase.