Este Salmo es anónimo, pero su parecido con el anterior da cabida a la suposición que es del mismo autor. Los Salmos 90 y 91 corresponden a dos pensamientos de Moisés en Deuteronomio 33:27. El Salmo 90 desarrolla la verdad: “El eterno Dios es tu refugio” (Dt. 33:27El eterno Dios es tu refugio, Y acá abajo los brazos eternos; El echó de delante de ti al enemigo, Y dijo: Destruye.), mientras que el 91 nos asegura que “debajo de sus alas estarás seguro” (91:4Con sus plumas te cubrirá, Y debajo de sus alas estarás seguro; Escudo y adarga es su verdad.).
Satanás citó los versículos 11 y 1210 No te sobrevendrá mal, Ni plaga tocará tu morada. 11 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, Que te guarden en todos tus caminos. de este Salmo durante la tentación de Cristo en el desierto (Mt. 4:6y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, En sus manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra.). Observemos la frase que Satanás omite al comparar la cita con el original.
Subrayemos dos cosas:
1. La protección de Dios (vs. 1-13Ir a la Biblia en línea). Hagamos una lista de todos los males de los cuales nos puede librar el Señor. Hay peligros reales como el león y el áspid y peligros imaginarios como el dragón. Nadie ha visto un dragón, pero el temor al dragón es real y de esto nos puede librar nuestro Dios.
2. Las promesas de Dios (vs. 14-1614 Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre. 15 Me invocará, y yo le responderé; Con él estaré yo en la angustia; Lo libraré y le glorificaré. 16 Lo saciaré de larga vida, Y le mostraré mi salvación.). Dios hace ocho promesas. Debemos enumerarlas y procurar vivir apoyados en ellas. Pero hay dos condiciones en estos versículos que debemos procurar acatar.
Es necesario amarle y conocer su nombre para poder invocarlo y ver el cumplimiento de sus promesas.