Enero 29

Salmo 70:1-5Ir a la Biblia en línea (sitio externo)

¡AUXILIO!

Este salmo es una repetición del 40:13-1713 Quieras, oh Jehová, librarme; Jehová, apresúrate a socorrerme. 14 Sean avergonzados y confundidos a una Los que buscan mi vida para destruirla. Vuelvan atrás y averg:uéncense Los que mi mal desean; 15 Sean asolados en pago de su afrenta Los que me dicen: ¡Ea, ea! 16 Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, Y digan siempre los que aman tu salvación: Jehová sea enaltecido. 17 Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.. Vea las notas sobre ese salmoSalmo 40 para mayores comentarios y las del Salmo 53Salmo 53 para recordar el porqué de las repeticiones que hay en las Escrituras.

Notemos que hay urgencia en esta oración: “Apresúrate” (vs. 1,51 Oh Dios, acude a librarme; Apresúrate, oh Dios, a socorrerme. 5 Yo estoy afligido y menesteroso; Apresúrate a mí, oh Dios. Ayuda mía y mi libertador eres tú; Oh Jehová, no te detengas.), “No te detengas” (v. 5Yo estoy afligido y menesteroso; Apresúrate a mí, oh Dios. Ayuda mía y mi libertador eres tú; Oh Jehová, no te detengas.). Una ilustración hermosa de la respuesta a esta oración aparece en la parábola del hijo pródigo. Leemos que al volver el hijo a la casa del padre, éste “fue movido a misericordia, y corrió” (Lc. 15:20Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó.).

¿Estamos en inminente peligro hoy? Clamemos a Dios con confianza. Tal vez nos daremos cuenta que antes que nosotros pensásemos en orar, Dios ya había dado pasos para responder a nuestro clamor (Is. 65:24Y antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído.). Recordemos también la última promesa que leemos en la Biblia: “Ciertamente vengo en breve” (Ap. 22:20El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús. ).

El pronto auxilio debe producir alegría en el alma y testimonio en los labios: “Engrandecido sea Dios” debe ser el canto constante de los que aman la salvación de Dios (v. 4Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, Y digan siempre los que aman tu salvación: Engrandecido sea Dios.).

“El Sembrador”
La Semilla es la Palabra de Dios
Apartado Postal 28,
94300, Orizaba, Ver., México.
xm.gro.rodarbmesle@rodarbmesle